Castilla y León Televisión
No hubo barullo ni alboroto en las ferias de Salamanca y eso que todas las atracciones estaban abiertas. Ha sido la primera vez que se apagaba la música y las sirenas de los coches de choque. El motivo: que las personas con autismo también puedan disfrutar de las barracas. La iniciativa vuelve a repetirse el viernes.
Se trata de una iniciativa de la asociación de niños con autismo, Ariadna en colaboración con el Atyo de la ciudad y el colectivo de feriantes.