El aumento de casos de coronavirus vuelve a estar ahí, y preocupa no por la gravedad de los síntomas gracias a la vacuna, sino por el alcance laboral de los contagios, empezando por el personal sanitario, donde está causando muchas bajas. El Sacyl contabiliza ya 1.123 bajas. 

En Castilla y León han aumentado un 30% en las últimas dos semanas por culpa de las dos nuevas variantes, más contagiosas. También crece la presión hospitalaria. Aun así, de momento desde la Junta descartan imponer restricciones. Defiende que dice seguir los criterios del Consejo Interterritorial de Salud, que son de ámbito nacional. Apela a la responsabilidad individual y al uso responsable de la mascarilla en interiores cuando no se cumplan las condiciones de distancia o cuando estemos en contacto con personas vulnerables. 

Sobre el aumento de contagios entre el sector sanitarios, la Junta dice que preocupa, pero que no hay que alarmarse, ya que de momento estamos lejos de otras olas. 

Reunión de expertos en Ponferrada

El aumento de casos ha puesto también en guardia a algunos municipios. Es el caso de Ponferrada, ha convocado a su comité local de expertos para ver en qué recomendaciones se puede hacer hincapié. En esa reunión los especialistas han lanzado un mensaje de preocupación y, a su vez, de calma a la población. El comité recomienda mantener la distancia de social, entre otras. Piden a los administradores locales que se promueva el uso de mascarilla en algunos centros públicos.

Aumenta la venta de mascarillas

Con el aumento de contagios y las recomendaciones que se empiezan a oír de forma reiterada, crece el número de mascarillas que se venden y se usan. Lo comprobamos en los entornos laborales, en interiores, pero también en la calle, sobre todo en algunos grupos y cuando no se puede mantener la distancia de seguridad. Crece la conciencia sobre el riesgo de contagio real.

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