Un pueblo de a penas 104 habitantes en el que se puede disfrutar de paz y sosiego en las orillas del Embalse de Almendra o pasear entre sombras de encinas y tomillos...
Se dice que el despoblado de San Juan, en la Dehesa del Cuartico, es la raíz de esta localidad. Puntas de flecha de cuarcita, estela romana dedicada a Cloutina y cabeza labrada en piedra representando tal vez un demonio son los restos encontrados en él.
El actual pueblo, posiblemente, fue repoblado por gentes originarias de Galicia o del Norte de Portugal.
Estuvo a punto de desaparecer, al igual que Argusino, cuando se construyó el Embalse de Almendra. Las aguas anegaron el tramo final dela Rivera de las Suelgas llegando hasta las propias casas. La antigua Iglesia hubo de ser desalojada en 1970. Hoy, se halla abandonada a su suerte, mostrando desolada sus descarnados arcos.
Las construcciones más representativas de la localidad son: el Puente de la Rivera, próximo a la antigua Iglesia, construido en 1527 durante el reinado de Carlos V para facilitar la comunicación entre Fermoselle y Ledesma, y la Fuente Pelayo que, por su emplazamiento ,medida de sus piedras y su forma abovedada, puede tener origen romano.