El menor autor de una paliza que se produjo en agosto de 2018 y acabó con la vida de un hombre, conocido como La Ely, con el que mantuvo relaciones sexuales junto al Centro Comercial Vallsur de Valladolid, ha sido condenado por el Juzgado de Menores a un internamiento terapéutico en régimen cerrado por una duración de seis años, complementada por una medida de libertad vigilada de tres años, siendo de abono el tiempo de la medida cautelar. El juez le considera autor responsable de un delito de asesinato y un delito de robo con violencia, según la sentencia conocida este martes.
Además se establece para el menor el pago de 20.000 euros de indemnización para los familiares del fallecido y el pago a Sacyl de la la suma de 46.764,43 euros por el coste de la asistencia hasta que la víctima falleció, respondiendo ante dichas solidariamente los progenitores del condenado, en un 100% el padre y en un 1% la madre, según se recoge en el fallo judicial.
Como hechos probados la sentencia explica que el menor, de 15 años en el momento de los hechos, y sin conocimiento ni consentimiento de su madre, con la cual convivía en Puente Duero, se fue a la casa de unos amigos situada en los alrededores del Centro Comercial Vallsur. Hacia las cinco de la mañana recibió una llamada de su madre al percatarse de su ausencia del domicilio, negándose el menor a decirle, pese a los requerimientos de la otra, dónde estaba.
Al llegar a la altura del Centro Comercial Vallsur, el menor cruzó la calzada en la confluencia de la calle Camino Viejo de Simancas con la avenida de Zamora, donde se encontró casualmente con la víctima quien llevaba varios minutos por la zona. "No consta contacto de clase alguna, ni conocimiento previo, entre ellos", añade.
Relaciones sin coacción
El relato de los hechos señala que, tras una breve conversación ambos acordaron mantener relaciones sexuales y "de forma distendida y sin que medie coacción alguna del mayor sobre el menor", recorrieron toda la fachada del centro comercial que da a la avenida de Zamora. Allí mantuvieron relaciones y posteriormente lo inmovilizó con intención de provocar su asfixia.
Hospitalización
La víctima permaneció hasta el 17 de septiembre en la UCI y ese día pasó a hospitalización de neurología. Durante todo ese tiempo permaneció estable dentro de la gravedad. Pero el 21 de septiembre experimentó un empeoramiento general y falleció el 22 de septiembre de 2018 a las 19.45 horas como consecuencia de los múltiples traumatismos craneoencefálicos y la anoxia por compresión cervical que produjeron el daño cerebral.
El fallo judicial confirma que en la tarde del mismo día en que ocurrió la agresión, la madre del menor le dijo que tenía que entregarse y confesar los hechos, tras lo cual ambos se presentaron sobre las seis de la tarde en la comisaria de Delicias, donde el menor confesó ser el autor de la agresión y entregó los teléfonos sustraídos.
No está acreditado que el menor hubiera consumido de drogas o alcohol en cantidad que afectara a sus facultades volitivas o intelectivas, mientras el menor no presenta ninguna enfermedad psicopatológica que altere o disminuya su imputabilidad. Lleva cumpliendo una medida cautelar de internamiento terapéutico en régimen cerrado. La víctima tenía 59 años, carecía de ascendientes y descendientes y vivía solo aunque tenía cuatro hermanos.