Doscientos vecinos del barrio de Parquesol, en Valladolid, viven con temor a que una promoción entera de chalets abandonados sea ocupada de forma masiva. Se trata de veintidós viviendas vacías desde 2007 que ya fueron saqueadas y que, desde hace unos meses, están empezando a ser ocupadas.

Los vecinos de alrededor están hartos. Primero fueron los robos, luego las pintadas y ahora, los okupas. En el pasado ya tuvieron inquilinos ilegales y lograron echarlos, pero ahora los nuevos okupas han entrado y temen un “efecto llamada” por el Ingreso Mínimo Vital.

Se han puesto en contacto con Policía y con el Ayuntamiento y no les han dado ninguna solución. La nueva promotora les ha anunciado que montará pisos pilotos para venderlos y rehabilitarlos, por lo que los vecinos mantienen la esperanza. Mientras eso llega, ya se han organizado con un grupo de Whatsapp en el que se avisan cuando ven algo o a alguien sospechoso y con patrullas de vigilancia que rodean los chalets día y noche.