La violencia filioparental, la que se ejerce de hijos a padres, continúa siendo en muchos casos un tabú. Muchas agresiones no son denunciadas y un escaso porcentaje llega a los tribunales. Una jornada organizada por UGT en Ávila aborda esta problemática.

Cada año en Castilla y León se denuncian 4000 casos de violencia de hijos hacia sus progenitores. Pero solo un 15% de ellos acaba llegando a la vía judicial.

Según los expertos, en el ámbito rural se dan más denuncias que en las ciudades, pero es en los grandes núcleos de población donde un mayor porcentaje llega a los juzgados.

Pero pocos casos, a penas, el 20% corresponden a menores. Muchas de estas agresiones se ejercen desde hijos de mediana edad hacia padres ancianos.

Una problemática que se ha abordado en la primera jornada de violencia filioparental organizada por UGT Ávila.

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