Si los alumnos de Singapur obtienen sistemáticamente los mejores resultados en Matemáticas de la OCDE, por qué no ver cómo aprenden estos chicos matemáticas.
Así surgía el método Singapur que una empresa pedagógica ha comenzado a introducir en España desde Salamanca. Se trata de un conjunto de técnicas que cambian conceptos como signos matemáticos o números abstractos por algo comprensible para los niños.
Son diez instrumentos los que básicamente se manejan en este método. En general, son materiales manipulables, con los que los niños aprenden, comprenden y juegan.
Sus defensores afirman que a diferencia de lo que ocurre a menudo en las aulas con métodos poco pedagógicos, este sistema permite visualizar conceptos abstractos.
El Método se imparte en colegios de Salamanca, Valladolid y Burgos como actividad extraescolar, aunque han comenzado las conversaciones con la Consejería para poder implantarlo de forma piloto en el currículo educativo de algún centro.