El presidente de Caja de Ávila, Agustín González, ha afirmado que la nacionalización de Bankia "garantiza la tranquilidad" y despeja todas las dudas que pueden haber surgido en los últimos días sobre los fondos de los más de 10 millones de impositores que han depositado sus ahorros en la entidad.

Para González la decisión del Gobierno de "adoptar la gestión" de Bankia ha sido un "acierto" porque ahora la entidad cuenta con una mayor solverncia "de la que podía tener ayer" y cuenta con la "garantía del Estado".

A la pregunta de si se plantea su dimisión como presidente de Caja de Ávila, González se refirió al proceso de renovación de órganos colegiados que se abordará esta misma tarde en el Consejo de Administración de la entidad abulense. "Mi dimisión puede ser hoy o no ser, no tiene ningún sentido porque la renovación es inmediata", puntualizó. De la misma manera, González supeditó a ese resultado electoral el seguir formando parte del Consejo de Administración de Bankia.

En cuanto a la Obra Social, el presidente de Caja de Ávila afirmó que este año se ejecutará el presupuesto previsto, pero que desconoce qué ocurrirá el próximo ejercicio puesto que el nuevo equipo directivo será el que deba marcar las directrices al respecto.

González obvió responder a la pregunta de si considera que los gestores de Bankia deberían asumir responsabilidades en la situación a la que ha llegado la entidad financiera.