Ovación de los vecinos de Paramo del Sil cuando la marcha minera llegaba a la localidad. Pletóricos a pesar de un esfuerzo para el que dicen no estar preparados. Optimistas sobre todo por el calor transmitido por la gente que les ha respaldado al paso por los pueblos del Alto Sil.
Todos tienen muy presente la primera marcha negra, el ejemplo que dio, los resultados que consiguió.