Al Hospital Universitario de Burgos le hacen falta cinco anestesistas más. Desde hace semanas no encuentran ninguno. La solución, trasladar a médicos de este centro hospitalario a uno privado, con anestesista incluido, para que puedan operar. Las intervenciones quirúrgicas que allí se están llevando a cabo son de cataratas y hernias inguinales.
Sólo dos médicos del hospital se han negado a operar en la privada. La medida, que es puntual y temporal según Sanidad, está permitiendo además reducir la lista de espera.
La consejería intentará contratar a finales de este mes a los anestesistas que ahora están haciendo el MIR.