El programa PAEM ayuda a la creación de 3.000 empresas en Castilla y León

'La mujer se encuentra con mayores dificultades de financiación'

  • Yolanda Sánchez, Técnico del Programa Apoyo Empresarial a las Mujeres, hace balance tras unas década en funcionamiento

  • El programa es impulsado por las Cámaras de Comercio

Estefanía Ureña

Cuando uno decide emprender son muchas las dudas que se presentan. Qué tramites hay que realizar, qué licencias hay que solicitar, cuáles son las obligaciones fiscales y laborales o a qué tipo de subvenciones se puede acceder. Son solo un ejemplo.

Desde hace diez años, a través del Programa PAEM, las Cámaras de Comercio de Castilla y León asesoran, informan y ayudas a las mujeres emprendedoras. En una década han atendido más de 15.000 casos, consultas que se han traducido en la creación de 3.382 empresas.

"Las guiamos en todo el camino, en todo el proceso", señala Yolanda Sánchez, técnico de este programa en la Cámara de Comercio de Valladolid, "desde lo que es definir la idea, ver un poquito el mercado al que se dirigen. Estudiamos todas las formas jurídicas posibles".

El perfil de las emprendedoras, que después se convierten en empresarias, es el de una mujer entre 25 y 45 años, con estudios, y en una situación de desempleo. Este fue precisamente el caso de Luz Iglesias. Trabajadora por cuenta ajena, decidió cambiar de rumbo profesional cuando su empresa echó el cierre. "Yo creo que fue el momento de decir, en vez de empezar de nuevo a buscar trabajo, voy a montar mi propio negocio".

Luz regenta en Valladolid un establecimiento en el que vende alimentos para personas alérgicas o intolerantes. Tardó más de un año en hacer realidad su idea tras analizar que había una necesidad en este sector. "Hay mucho que mirar, no se trata de decir, voy a abrir y que sea lo que Dios quiera", comenta Luz.

Al programa PAEM no sólo acudió cuando necesitó asesoramiento al principio. Ahora también solicita ayuda para otras cuestiones. "Hubo un momento en el que quise vender mis productos fuera, en Europa" señala Luz "y yo era consciente de que en la Cámara también me podían ayudar en este tema. Ahora, por ejemplo, están echándome una mano porque quiero hacer una inversión tecnológica y son cosas muy específicas".

Para Yolanda Sánchez el programa ha sido y es muy necesario porque "es cierto que la mujer se encuentra con mayores dificultades a la hora de acceder a financiación, con mayores dificultades también a la hora de trabajar con su entorno familiar y laboral y, por supuesto, para conciliar vida laboral y familiar".

Al margen del autoempleo generado, se han creado además 330 puestos de trabajo.