"Decir que las generaciones jóvenes son nativas digitales quita legitimidad a los padres a la hora de inculcarles el uso responsable". La autora del libro Ser padres en la era digital, María Zabala, asegura que eso termina creando inseguridad en los progenitores que no tienen formación y reciben mensajes negativos del exterior. La clave se basa en escucharles, "en conocer a nuestros hijos" y saber por qué utilizan las redes sociales o cuáles son sus referentes "sin tener una actitud controladora". 

Zabala no habla de una edad ideal para empezar a tener móvil porque considera que depende de razones realistas y diferentes para cada familia, "no me hace mejor padre que sea el último de la clase en tenerlo". Indica que el buen ejemplo no se encuentra en que "no nos vean usando tecnología sino la manera en qué lo hacemos" y que el acceso debe ser gradual. 

Finalmente, asegura que hay un mal enfoque en la visión sobre las adicciones a las tecnologías y los padres, en vez de pensar en cómo evitarlas, tendrían que preocuparse por conocer cómo se relacionan los hijos con los dispositivos digitales y cómo les afecta en la vida: "La señal de alarma es si el móvil interrumpe de manera constante otras rutinas", concluye en la entrevista de Cuestión de prioridades.