Miles de personas presenciaron la procesión de la Real Hermandad del Santísimo Cristo de las Injurias, más conocida como Cofradía del Silencio, por el tradicional acto del juramento del silencio celebrado previamente en la plaza de la Catedral, como uno de los momentos más representativos de la Semana Santa de Zamora. La Hermandad fue fundada en 1925 y cuenta en la actualidad con más de 2.400 miembros.
La Junta Directiva de la Hermandad designó este año al cirujano taurino Enrique Crespo, hermano emérito de la Cofradía, como oferente que se dirigió al Cristo de las Injurias. "Tu venerable imagen nos evoca tristeza y esperanza a la vez. Tú, Señor, te ofreces en este Miércoles de tinieblas para redimirnos", afirmó Crespo Rubio. "Aquí nos ofrecemos, gente común. Están honrándote las buenas almas de Zamora. Te ofrecemos nuestra oración porque hoy empieza con tu sacrificio la redención de todos los seres humanos", añadió.
El oferente pidió por "los enfermos, los traumatizados, los heridos, los que sufren en un hospital" y agregó: "Ofréceles el bálsamo que note ofrecieron en Galilea. Nunca abandones a los que sufren cualquier tipo de padecimiento. Aún queda mucha maldad", además de referirse a formas de maldad actualizadas en "bombas y proyectiles" y de recordar a las víctimas "del odio, la mezquindad y la infamia".
Los integrantes de la Cofradía, ataviados con túnica de estameña blanca y capirote de veludillo rojo con el distintivo de la Hermandad en la pechera, cíngulo de color blanco, decenario, guantes blancos y calzado negro, se reunieron frente a la seo zamorana para hacer el juramento del silencio, de rodillas, en una solemne atmósfera previamente arropada por el sonido de un violonchelo y con las palabras pronunciadas por el obispo de Zamora, Gregorio Martínez.
Después de la ofrenda del silencio y del juramento, la procesión discurrió por la Rúa de los Notarios, Rúa de los Francos, plaza de Viriato, calle de Ramos Carrión, Plaza Mayor, calle Renova, plaza de Sagasta, Santa Clara, avenida de Alfonso IX, calle de San Torcuato, plaza de Sagasta, Renova, Plaza Mayor, Juan Nicasio Gallego, calle de la Reina, Corral Pintado y plaza de Santa María la Nueva, donde terminó el recorrido, en el Museo de Semana Santa.