Cada año se incorporan al campo en Castilla y León unos 500 jóvenes. Para comenzar su actividad agraria reciben unas ayudas que solventan parte de las inversiones. Esos fondos llegan de la Unión europea, el Ministerio y la Junta. Algunos de estos agricultores o ganaderos recién incorporados denuncian que esos fondos tardan años en llegar, y se ven obligados a estar hipotecados antes de obtener beneficios.
Es el caso de Sara Escalero, una ganadera de Zamora que para poner en marcha una explotación de ganado vacuno ha hecho una inversión de 80.000 euros. Hace año y medio que comenzó y aún espera la ayuda, casi la mitad de lo que se ha gastado.
'Malamente se va tirando porque se saca muy poco del ganado, así que con ayuda de los padres y de los abuelos vamos tirando para delante' explica.
Lo mismo le sucede a Gonzalo Barbero, de Salamanca. Lleva 5 años incorporado, hace 3 que justificó las ayudas, que demostró que se dedica a la ganadería. Añade que 'te gastas los pocos ahorros que tienes y lo que le pides al campo y sólo vas sacando para ir pagando las cuotas del banco'.
Son dos de los 500 jóvenes que se incorporan cada año al campo en Castilla y León. La Alianza por la Unidad del Campo denuncia retrasos de hasta cinco años en algunos casos.
Estos dos jóvenes dicen que la situación es complicada. 'Como la ayuda no lleguie pronto y el campo no se ponga un poco mejor va a ser difícil tirar para adelante' explica Sara.
Gonzalo cree que 'los políticos cuando salen a la palestra bien alardean de las ayudas para jóvenes, las ayudas para jóvenes, por lo menos que no engañen a la gente que les digan que tardan en llegar mucho'
Lo cierto es que los trámites son largos. Los jóvenes comienzan la actividad. Tienen un año y medio para hacerla efectiva y a partir de ahí Agricultura certifica como válida su explotación. Desde ese momento ya podrían cobrar los fondos.
La Consejería de Agricultura y Ganadería es la aministración que hace efectivos esos pagos. Desde el departamento de Silvia Clemente insisten en que los expedientes certificados antes del año 2012 están ya abonados. Pero también reconocen que hay un retraso debido a que los fondos que debe el Ministerio llegan tarde.
Juan Zapatero, el secretario general de la Consejería añade que 'verdaderamente la Administración solo puede pagar por normativa europea cuando la incorporación es efectiva y cuando la inversión se ha hecho. Y desde que eso pasa yo le aseguro que no hay ningún expediente de antes de 2012 que no esté pagado'
Las ayudas a la incorporación pertenecen a los Fondos de desarrollo Rural que abona la unión europea, el Gobierno y la Junta de Castilla y León. La Consejería de Agricultura y Ganadería dice que no pueden pagar esos fondos porque las transferencias del Ministerio no llegan puntualmente.
'Ahora estamos trabajando con el Ministerio para resolver estas diferencias. Esperamos que en breve llegue una cuantía bastante significativa', explica Zapatero.
Para evitar retrasos la Consejería creará para el próximo programa de desarrollo rural una herramienta financiera: 'Nos va a permitir anticipar esa financiación al joven o al agricultor que moderniza por el 100 por cien de la inversión y además con carácter previo de haber hecho el la inversión'. Una especie de préstamos gracias a los cuales podrán disponer de liquidez desde que pongan sus pies en el campo.