La lluvia deslució en parte la llegada de los Reyes Magos a Palencia. Sin embargo, y pese a las inclemencias meteorológicas, Melchor, Gaspar y Baltasar pudieron recorrer las calles de la ciudad. Los niños palentinos pudieron disfrutar de la cabalgata que contó con más de 600 figurantes, 6 carrozas y en la que se repartieron más 1.500 caramelos. Los más pequeños se despertaron temprano el día 6 para comprobar que los reyes, una vez más, les habían traído todo lo que habían pedido.