El campo se concentrará en Arévalo, en Ávila, para pedir "certezas" para un sector cerealista lastrado por los costes de producción que, lejos de bajar no dejan de "subir". Insisten en que están arruinados por la especulación de los operadores del mercado y las importaciones masivas de otros países, a lo que se suma la nueva amenaza que supondría la firma del acuerdo de la UE con Mercusur.