Castilla y León Televisión
Sacar el pasaporte COVID es ya un gesto cotidiano en Francia si se quiere atravesar las puertas de cualquier establecimiento de hostelería, ocio o cultura, en cuyo interior ya no se exige la mascarilla. Su parlamento aprobó ayer la obligatoriedad de presentar este certificado como medida para intentar frenar el movimiento antivacunas, que este fin de semana movilizó a miles de personas en las principales ciudades del país.
En Italia también se exigirá el certificado COVID a partir del 6 de agosto para acceder al interior de la hostelería, ocio, competiciones deportivas o espacios públicos como piscinas. El simple anuncio de la medida ha disparado un 200% las solicitudes para vacunarse.
Mientras, en Alemania, el Gobierno de Angela Merkel está estudiando que las restricciones solo afecten a los no vacunados. Tiene la pauta completa casi el 50% de la población y su incidencia es de 13,8 casos por cada 100.000 habitantes, 49 veces menor que la de España.