Todo lo que se dice en sede parlamentaria queda reflejado en el Diario de Sesiones de las Cortes. El equipo de transcriptores plasma sobre papel lo que se dice, el contexto, el ambiente o las posibles incidencias durante cada sesión. Su trabajo ha evolucionado técnicamente, ahora su herramienta es un ordenador, pero antes este proceso se hacía con cintas y dictáfonos.

Toda la plantilla trabaja a pleno rendimiento para reflejar en papel todo lo que se dice en una sesión. Transcriben a más de 250 caracteres por minuto. Pilar lleva 34 años en el equipo de transcriptores y pese a la densidad de este trabajo, confiesa que engancha. Elaboran dos documentos: el Boletín Oficial de las Cortes y el Diario de Sesiones. Un archivo de todos los debates que también puede consultarse en Internet.