CORONAVIRUS

Sánchez enfría un posible toque de queda, pide a Madrid que se aclare, y dice que se debatirá con todas las CCAA

El primer ministro italiano subraya que no hay que "cometer el error de cambiar de idea cada día" en función de las encuestas

Europa Press

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha afirmado este martes que antes de plantearse la posibilidad de decretar un toque de queda para luchar contra la pandemia, la Comunidad de Madrid debe aclarar primero si está pidiendo o no esta medida, y después, debe debatirse con el resto de Comunidades Autónomas. Eso sí, ha garantizado que los gobiernos autonómicos contarán siempre con el "total" apoyo del Ejecutivo central.

De este modo, el presidente del Gobierno ha enfriado la posibilidad de poner en marcha por ahora esta medida a nivel nacional que, según ha explicado el ministro de Sanidad, Salvador Illa, requeriría necesariamente la declaración del estado de alarma.

En rueda de prensa en Roma junto al primer ministro italiano, Giussepe Conte, Sánchez ha señalado que primero hay que ver en qué se sustancia esa propuesta de Madrid y, después, debatirla con el resto de Comunidades en el seno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS).

"LO PRIMERO" ES SABER QUÉ QUIERE MADRID

"Lo primero y más importante es saber exactamente si la Comunidad oficialmente nos está pidiendo el toque de queda o no. Hasta ahora lo que sabemos es que ha habido declaraciones del consejero de Sanidad", ha afirmado Sánchez, en relación a la posibilidad que ha planteado el consejero madrileño Enrique Ruiz Escudero.

A este respecto, Sánchez ha señalado que esperan que la Comunidad detalle su propuesta en la reunión de este lunes del Grupo COVID entre el Gobierno regional y el Ministerio de Sanidad, para poder después tratar el asunto en el plenario del CISNS con el resto de Comunidades que tendrá lugar el jueves.

Asimismo, Sánchez ha avanzado que lo que sí está previsto es que el próximo jueves las Comunidades y el Gobierno den vía libre en el CISNS al nuevo sistema de fases y semáforos para aplicar en cada territorio determinadas "recomendaciones" contra el virus, en función de la situación epidemiológica que tengan.