SURCOS

Los cambios en las tarifas eléctricas hacen que la rentabilidad en el regadío peligre

Castilla y León Televisión

El 1 de junio es la fecha que los regantes tienen marcada en rojo. A partir de ese momento se empezarán a aplicar las modificaciones en las tarifas eléctricas que se establecieron el pasado 23 de marzo en el BOE  y que supondrán cambios a la hora de realizar contratos y de usar la energía que tienen los regantes.

A partir de esa fecha tendrán que hacer un esfuerzo mayor e intentar consumir en los periodos más baratos. Algo que en determinados momentos del año es imposible, e incompatible, con las necesidades hídricas que los cultivos tienen.

Una de las quejas que el regante tiene afecta a los costes fijos que tienen que pagar incluido en los periodos en los que no tienen que regar.

La opción de tener en un mismo contrato dos potencias diferentes es una de las peticiones que desde hace tiempo están haciendo los regantes. Este año, en la aplicación de los presupuestos generales del Estado, se incluyo una enmienda que contempla esta cuestión. Enmienda ante la que el Gobierno voto en contra pero que finalmente se aprobó. El plazo para concretar este punto fue de seis meses, de momento, ya han pasado cinco y el Gobierno no ha dado ningún paso al respecto.

Pensando en el presente y en lo que ocurrirá a partir del 1 de junio al regante son muchos los estudios que afirman que el incremento en la factura eléctrica podría ser de entre un 30 y un 70%.