ECONOMÍA

El bono social: Una de las pocas opciones que tienen las familias para abaratar costes en su factura

La ayuda, otorgada por el Gobierno, se convierte en un salvavidas para muchas familias que intentan sobrevivir ante una subida asfixiante del precio de la luz

 

Fue el 1 de julio de 2009 cuando el ejecutivo español creó esta medida pensando en los hogares más vulnerables. Ha llovido mucho desde entonces. Ahora, más de una década después, la luz cortocircuita nuestros bolsillos dejando situaciones de vulnerabilidad jamás vistas hasta ahora. La pobreza energética no ha llegado con estas últimas semanas de subidas fugaces en el precio de la energía. Esta pobreza lleva tiempo anclada en los hogares más pobres de nuestro país, y es en las estaciones más duras del año, verano e invierno, cuando se hacen más latentes que nunca. Muchas familias, muy numerosas algunas de ellas, necesitan de algún tipo de ayuda que permita llevar una vida lo más diga posible. Aunque en nuestro país disfrutan de este bono unas 700.000 viviendas, existen más de un millón y medio de solicitudes deseosas de ser aprobadas.

Este bono social está dirigido para las siguientes situaciones:

  • Familias monoparentales.
  • Personas en situación de dependencia.
  • Rentas más bajas y familias numerosas.

Hablamos con Alberto, miembro de la Asociación de Familias Numerosas de Burgos. También con Raquel, trabajadora de Cáritas. Instituciones como la suya hacen un trabajo enorme para que el menor número de personas posibles se queden sin luz ni calefacción en sus casas. Solo en la provincia de Valladolid, Cáritas lleva invertido en esta primera mitad del año casi 43.000 euros para hacer frente a los pagos de 195 familias.