El campo no encuentra su lugar en la reforma laboral: "El sector primario no está representado en conjunto con la particularidad que tiene", destaca el portavoz de UPA Soria, Raúl Ramírez. Indican que tanto la ganadería como la agricultura se caracterizan por la temporalidad laboral. Para las campañas ahora los contratos temporales no podrán superar los 90 días para las campañas agrícolas. Seis meses para producciones imprevisibles.

"En la Ribera de Duero se necesita durante tres semanas o un mes al año para recoger la uva y no tiene sentido contratar una persona durante un trimestre o medio año", así de contundente se muestra el presidente de Asaja Burgos, Esteban Martínez. El Gobierno elimina el contrato por obra y servicio para impulsar el trabajado fijo discontinuo. En el campo existen las rotaciones, "no suelen trabajar en la misma campaña dos o tres años seguidos", asegura Alfredo Cabrerizo de COAG Soria. 

El PSOE defiende que la reforma laboral del Gobierno sí se adapta al campo porque existen contratos y modelos específicos que van a garantizar sus circunstancias específicas. Pero agricultores y ganaderos ahora tienen dudas a la hora de contratar.