CORONAVIRUS

Fernández Mañueco presenta este martes la postura de la Junta y el Comité de Expertos para el abordaje de la pandemia por COVID-19

El ministro Illa ya ha avanzado que, de momento, se descarta el confinamiento domiciliario

Ical

El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, presentará este martes una declaración institucional del Gobierno de la Junta de Castilla y León y el Comité de Expertos para el abordaje de la pandemia por COVID-19.

Lo hará a las 11 horas, después de la reunión prevista con el Comité que, según avanzó el pasado jueves la consejera de Sanidad, Verónica Casado, es partidario del confinamiento domiciliario en Castilla y León si el ritmo de contagios continúa creciendo. De hecho, la propia consejera ya ha pedido un instrumento jurídico al Gobierno que permita dar este paso, aunque todo dependerá de la evolución de los contagios y de la situación epidemiológica en la Comunidad.

Hoy mismo, en una entrevista a la Cadena SER, la consejera indicaba que "el confinamiento domiciliario es inevitable" ante las cifras actuales. "Ese confinamiento va a existir porque es necesario que frenemos el virus, aunque se permita el trabajo, la educación y otros aspectos que no tuvimos en marzo, pero habrá que limitar las actividades no imprescindibles y estar en casa, lo vamos a tener que hacer", dijo, para atribuir a la "fatiga pandémica" los incidentes violentos de Burgos y de León.

Pese a ser una de las posibilidades que baraja la Junta, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha descartado de momento esta posibilidad, después de que el Gobierno del Principado de Asturias solicitara el confinamiento domiciliario de 15 días para la Autonomía. Illa ha precisado que, desde su punto de vista, las restricciones aplicadas "pueden controlar la pandemia" por COVID-19. "Por ahora no prevemos el confinamiento", dijo, para precisar que hay que esperar a analizar los efectos de estas medidas.

Illa, que realizó estas declaraciones en una conferencia telemática, reconoció que llegan semanas complicadas y que hay que aprender a convivir con el virus hasta que se desarrolle una vacuna, tiempo que no será inferior, según sus cálculos, a cinco o seis meses.