Castilla y León Televisión
Unas 800 familias que no están llevando a sus hijos al colegio este curso acaban de enviar una carta a la Consejería de Educación denunciando que son discriminados. La mayoría de las comunidades sí contemplan la educación en casa para las familias de riesgo o por miedo a la COVID-19. Es el caso de la hija de Leticia Romero que tiene una patología y ha decidido anteponer su salud a la educación presencial de su hija.
Ella se encarga de que no pierda el curso desde casa y solo pide que le permitan la educación telemática que se ofrece a los niños de aulas en cuarentena. Su situación se considera como absentismo y todas las semanas recibe un requerimiento escrito de Educación pero en seis meses no ha podido hablar con las autoridades educativas. Mientras, el curso avanza, las faltas de asistencia siguen sumando y el miedo a llegar a fiscalía aumenta.