Febrero acumula más de 800 fallecidos por COVID-19. Solo en este mes un tercio de las muertes por coronavirus se ha producido fuera de los hospitales y de las residencias. Muchos han muerto en sus domicilios, aunque quizás no los 2.500 que deja la estadística porque se han contabilizado cada caso sospechoso y además, la presidenta del Colegio de Enfermería, Silvia Sáez, explica que no se han realizado todas las autopsias necesarias para confirmar la causa del fallecimiento. En algunos casos, el motivo ha sido el miedo a morir solos en los centros sanitarios. 

Además, los sanitarios determinan que los pacientes con enfermedades crónicas, oncológicas y otras patologías inestables han empeorado por culpa de este virus y en muchas ocasiones, los equipos de emergencias no se ha podido actuar a tiempo.