Un total de 86.000 personas viven ya en situación de Privación Material Severa. El incremento es del 57%. Una cifra que es una reflejo de los efectos de la pandemia.

Se duplica el tanto por ciento de personas que se retrasan en los pagos de los gastos de su vivienda. No es el único dato que aumenta. El número de personas que no pueden permitirse mantener la vivienda con una temperatura adecuada en Castilla y León supone el 6,6% de la población.

Castilla y León es la quinta comunidad con menor tasa AROPE, es el medidor de pobreza a nivel europeo, aun así el 15,1% de la población está en riesgo de exclusión social.

Aumentan también la brecha social y las desigualdades porque aunque se incrementa el crecimiento para unos también las necesidades para otros. Bajo los números hay personas y familias, por eso las entidades del tercer sector reclaman un cambio en la estrategia de lucha contra la pobreza.