SOCIEDAD

Ley de segunda oportunidad: empezar de cero tras perderlo todo

Hablamos con una mujer que lo ha conseguido. Todavía recuerda la llamada en la que se enteró de que estaba libre de cargas.

Castilla y León Televisión

Suena casi a utopía, pero es posible empezar de cero después de haberlo perdido todo o casi todo. Cada vez más españoles se aferran a la Ley de Segunda Oportunidad, un mecanismo que sirve para eliminar las deudas si el afectado reúne determinados requisitos. La Ley de Segunda Oportunidad está pensada para echar una mano a empresas y particulares que se ven ahogados por las deudas.

Desde que se aprobó, en 2015, no han dejado de aumentar los concursos instados: los casos que han llegado a los juzgados para determinar si esas personas podían reestructurar sus deudas. Los solicitantes de esta ley  se han multiplicado por cuatro en los últimos 6 años. Y eso, a pesar de que este mecanismo legal sigue siendo un gran desconocido.

Hablamos con una mujer que lo ha conseguido. Todavía recuerda la llamada en la que se enteró de que estaba libre de cargas.

Su caso se evidencia en miles de hogares, sobre todo a raíz de la pandemia. Carmen ha conseguido cancelar todas sus deudas. "Las cosas no me fueron muy bien. Estuve un tiempo pagando, pero llegó un momento en que ya no podía seguir pagando". En 2016, abre un bar y en seguida le empiezan a ahogar las deudas. El banco no daba tregua. "Tenía un número de teléfono que tuve que cambiar porque hasta las 9 de la noche llamándote... Eso era un acoso, que es que una persona termina enferma de los nervios. Bueno, de hecho yo terminé yendo hasta al psiquiatra y tomando medicación", reconoce. Fue entonces cuando descubrió la ley de Segunda Oportunidad.

Ana Isabel García, directora letrada de 'Repara tu deuda abogados' lo explica. "No es que no paguen porque no quieren, sino que no pagan porque no pueden. Por la situación en la que se encuentran".

Carmen reunía todos los requisitos. El primero de ellos: negociar antes con el banco para conseguir un plan de pagos justo. No fue posible. Además, era insolvente. "No puedes tener nada: ni coche, ni casa... Nada". La inmensa mayoría de los casos que llegan al juzgado, consiguen la reparación de la deuda.

Con la Ley de Segunda Oportunidad, se paralizarán todos los embargos porque esa deuda ha dejado de existir. "¿Sabes lo que es no tener deudas con nadie, que estás limpia de deudas? Eso es una tranquilidad para mí", reconoce Carmen. La tranquilidad de comprobar que era cierto: que se podía tener una segunda oportunidad.