La DGT propone que la nueva normativa de tráfico incluya las conocidas como multas verdes. Son sanciones que se impondrán a los conductores que contaminen de más. Por ejemplo, podrá ser motivo de sanción no parar el coche más de dos minutos con el motor encendido.

Además, será sancionable no llevar visible la etiqueta medioambiental. La DGT pide a los ayuntamientos que instalen radares que permitan medir las emisiones contaminantes de los vehículos gracias a que proyecta un haz de luz invisible que cruza la calzada, mediante el análisis de los cambios en la luz se podrá saber el alcance y nivel de contaminación. 

Esta tecnología ya se usa en algunos países, mientras que en Madrid, de momento, se ejecuta a modo informativo. Desde Opus RSE explican que una vez detectados los coches más contaminantes "reciben una notificación" para recordar que deben realizar una "revisión extraordinaria".