El pasado 3 de febrero el Gobierno restringía los vuelos desde Brasil para evitar que la variante pudiera colarse en España. Sin embargo, la Comunidad de Madrid ha anunciado dos nuevos casos que se suman al ya confirmado anteriormente. La cepa británica también sigue ganado terreno y representa el 25% de los casos en los hospitales madrileños.

La incidencia media continúa bajando y se sitúa en los 625 casos por cada 100.000 habitantes. Por ello, se plantean relajar las restricciones de cara al próximo jueves, 25 de febrero, cuando empezaría la desescalada: "Se ampliará el toque de queda a las 23 de la noche y el cierre de establecimientos a las 22 si la situación epidemiológica lo permite", indica el viceconsejero de Salud de la Comunidad de Madrid.  Además, no descartan utilizar códigos QR para el registro de clientes en hostelería como ocurre en Castilla-La Mancha.