El tráfico por la A-62 es constante, sobre todo, de camiones. La mayoría del tráfico rodado que va de Portugal hasta Europa pasa por allí de forma obligada. Desde el año 2001, empresarios y ayuntamientos reclaman al Gobierno un tercer carril en esta autovía. El alcalde de Simancas en Valladolid, Alberto Plaza, denuncia la paralización del tercer carril por una falta de voluntad política de un Gobierno que apuesta por poner el dinero de los Presupuestos Generales del Estado del año 2021 en otros lugares. 

El desdoblamiento con un carril más por cada sentido abarcaría el tramo de Dueñas a Tordesillas. Eso supondría un coste total de 350 millones de euros. En los presupuestos de este año, la partida se limita a poco menos de 400.000 euros.

Si el transporte fuera más fluido por esta autovía las mercancías llegarían antes. "El ganar tiempo es dinero, el abaratar costes", apunta Santiago Aparicio, presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE). También se evitarían los accidentes de tráfico. Los accesos a Simancas, en Valladolid, están condicionados por esta carretera. "Es un elemento que ha dividido en dos el municipio. Tenemos a un lado el barrio de Casas Nuevas, El Silo, y al otro lado el resto del casco histórico", apunta el alcalde de Simancas. 

El tercer carril supondría además un reclamo para que otras empresas se asentaran en torno a ese eje que cruza Castilla y León.