La uva de los viñedos centenarios de la Ribera del Duero soriana abre la vendimia de esta denominación de origen, debido a su maduración más temprana. Las circunstancias actuales hacen que sea el año más atípico que se recuerda. Tienen las mascarillas preparadas y han realizado PCR entre sus trabajadores. 

El Consejo Regulador de Ribera de Duero espera una vendimia buena en cuanto a cantidad, con unos 6.900 kilos por hectárea, gracias a las últimas precipitaciones. No se esperan complicaciones en cuanto a la calidad, aunque siguen pendientes de las temperaturas. La añada se espera muy buena y sana. 

Su recolección es igual de antigua que el viñedo: a mano y depositada posteriormente en cestas. Una vez terminen con estas parcelas prevén que el resto de la vendimia se inicie según lo previsto en la primera semana de octubre.