SOCIEDAD

Trece mujeres renunciaron a sus recién nacidos en Castilla y León en 2018 por problemas socioeconómicos

Es una opción legal que garantiza el anonimato de la madre y que sirve para evitar casos como el de los abandonos de bebés en plena calle con consecuencias fatales.

Castilla y León Televisión

Renunciar a un bebé después del parto es legal y anónimo, de hecho según los datos de los servicios sociales de Castilla  León,  13 mujeres lo hicieron en el año 2018. Primero hay que comunicar la decisión y luego el hospital pone en marcha el protocolo.

"Proteger la identidad tanto de la mamá como del bebé. la mamá tendrá que firmar una renuncia, el bebé se queda en nidos y los servicios sociales buscan una familia de acogida", asegura la trabajadora social del Hospital de León, María del Carmen Olmo. Si la madre no se arrepiente, cuarenta días después rarifica su decisión y hace la renuncia formal. 

Es una realidad que se vive en todos los hospitales de la comunidad; sólo el de León registró tres casos el año pasado. Para evitar trágicos sucesos como el de la pareja investigada Palencia por lanzar a su hijo al río existen programas de apoyo a mujeres embarazadas con dificultades socioeconómicas.