Castilla y León contabiliza este miércoles 158 brotes activos de SARS-CoV-2, seis menos que ayer, con 912 personas contagiadas vinculadas a los mismos, es decir, 83 menos, según los datos facilitados por la Consejería de Sanidad. Los que más preocupan son los registrados en una residencia de Candeleda (Ávila), que alcanza los 90 positivos, 78 residentes y 12 trabajadores; otro de origen familiar en Arévalo, con 27 confirmados, el de la localidad vallisoletana de Torrelobatón, con 25 casos, y un brote mixto, cuyo estudio y pruebas se siguen en Valladolid, pero que también afecta a las provincias de Segovia y Ávila.

Burgos continúa como la provincia más afectada en este sentido, con 46 focos que engloban a 210 contagios vinculados. En Valladolid se contabilizan 23 brotes que aún están latentes, con 143 positivos relacionados, seguida de Ávila y Soria, con 17 focos en cada caso y 177 y 92 casos activos, respectivamente.

Le siguen Palencia, con 16 focos y 106 positivos; Zamora, con 14 brotes y 70 personas contagiadas; Salamanca, con 12 y 48. Cierran la lista de focos latentes por COVID-19 Segovia y León, con siete y seis focos latentes, y 40 y 26 contagios relacionados, respectivamente.