Un total de 32 personas han perdido la vida en las carreteras españolas esta Semana Santa. Es la cifra más alta desde 2016 y eso teniendo en cuenta que los desplazamientos se han reducido casi a la mitad por el cierre perimetral. Pero también llama la atención que doce de esos fallecidos, más de un tercio, eran motoristas.

En Castilla y León cuatro personas han muerto en accidentes de tráfico y el 75% iban en moto. Desde la Unión Internacional en Defensa de los Motociclistas aseguran que hay muchas ilegalidades en las carreteras que les ponen en peligro. Por eso, piden más vigilancia y acción por parte de la DGT.

Hay carreteras que no cumplen con la anchura reglamentaria. Es una de las ilegalidades que los motoristas reivindican.