En la ciudad de Salamanca la incidencia acumulada es de 472 positivos, cifra que ha engordado por la imprudencias de los universitarios y las fiestas nocturnas. El asunto ha llegado a poner en cuestión la presencialidad en el campus este curso, con lo que eso implicaría económicamente para una ciudad eminentemente universitaria. Pero no ha sido el único caso en España, las universidades de León, Valencia y Granada están pasando por situaciones similares. Los rectores se han mostrado drásticos en un comunicado y advierten que solo controlando las zonas de ocios, se evitará el cierre del campus. Los alumnos aseguran que existe seguridad sanitaria en las aulas y no ven coherente esta medida.