Esta semana se cumple un año del accidente de tren de la Hiniesta que costó la vida a un maquinista en prácticas y a un vecino de Palacios del Pan, en Zamora. La zona del golpe y los quitamiedos del puente siguen igual que el día del accidente. La valla sigue volcada hacia el lado de la vía y se han colocado unas protecciones extra, con unos muros de hormigón, a lo largo del puente.

Con el proceso judicial aún abierto, la negociación con Adif ha sido también compleja, "porque reponer esas barreras no es quitar unas y poner otras. El firme donde van ancladas las barreras es el que ha fallado y, por tanto, ha habido que hacer un proyecto distinto totalmente, no habitual. Hay que poner las barreras de forma exterior a lo que es el puente", dice el vicepresidente de la Diputación de Zamora, José María Barrios. Mientras, para garantizar la seguridad, se ha limitado la velocidad y se han instalado semáforos que regulan el paso.

Los vecinos de Palacios del Pan siguen pasando por aquí a diario. Reclaman una solución para un tramo que ya era peligroso antes. La alcaldesa del municipio, Lidia Pechero, cree "que se ha destapado un poco el tema del puente, que siempre ha estado mal. Lo que tienen que hacer es solucionarlo y sobre todo lo antes posible".

Los trámites para reparar este punto podrán empezar en cuestión de semanas. El propietario de la carretera, la Diputación Provincial, ha recibido esta misma semana el visto bueno de Adif al proyecto. Para un futuro más incierto queda la posibilidad de diseñar un nuevo trazado que anule estas dos curvas de 90 grados.