Cuando se diagnostica el alzhéimer el trabajo psicológico es fundamental, sobre todo, en las primeras fases de la enfermedad: "En esa fase en la que aún es consciente y ve como pierde sus capacidades", explica la psicóloga Lucía López. Amelia Guzmán acude a la asociación Alzhéimer Soria y nos cuenta el miedo que se siente cuando se nota que no pueden hacer determinadas acciones del día a día. 

El trabajo de estas organizaciones es importante porque acompaña a los usuarios y a sus familiares durante todo el proceso. Destacan que durante los primeros momentos hay que estar bien informados e "ir aceptando etapa por etapa". Además, se les ayuda a mantener las capacidades que aún tienen.

Los familiares sufren especialmente el proceso de duelo del alzhéimer porque van perdiendo de forma progresiva a su ser querido y se enfrentan a una reorganización de roles: "Hay que intentar vivir el momento", recomiendan los especialistas. 

En España hay más de 600.000 personas con este tipo de demencia, 60.000 de ellas diagnosticadas en Castilla y León. Cada vez se detecta más temprano y en fases menos avanzadas, por ello, el trabajo previo y durante la enfermedad de los psicólogos resulta determinante para mejorar la calidad de vida de los pacientes.