MEDIO AMBIENTE

La calidad del aire en Castilla y León continuó siendo buena el pasado año

El umbral de contaminación permitido sólo se superó de forma puntual y en el caso del ozono en zonas de montaña de Segovia, Ávila y Salamanca

Estación de Control de Contaminación Atmosférica en el barrio de Huerta del Rey en Valladolid - Ical
Ical

Por undécimo año consecutivo, Castilla y León no registró superaciones de los valores límite de protección a la salud marcados por la normativa española y europea respecto a los contaminantes primarios que se respiran, según recoge el Informe Anual de Calidad del Aire 2019 que la Consejería de Fomento y Medio Ambiente acaba de publicar y que ya está disponible en su web.

En este ejercicio no hubo problemas de salud relacionados con la calidad del aire, a pesar de ser un año climatológicamente adverso, ya que se registró una pertinaz sequía durante el verano, acompañada de altas temperaturas y grandes periodos de calma atmosférica que no favorecieron la dispersión de los contaminantes.

Solo se superó el valor objetivo de protección a la salud por contaminación por ozono en las denominadas ‘montañas del sur’, en zonas de las provincias de Segovia, Ávila y Salamanca, al sobrepasarse puntualmente el valor legal en dos estaciones.

La conclusión de los técnicos de Medio Ambiente de la Junta es que la calidad del aire sigue siendo “buena” y en algunos lugares, “excelente”.

El informe de la Junta expone los resultados obtenidos a partir del análisis de los registros de todos los analizadores desplegados en la Comunidad de las redes públicas y privadas. Actualmente, en la Comunidad existen un total de 54 estaciones de control de la calidad del aire, de las cuales 23 son gestionadas por la Junta -22 fijas y una móvil- , cinco por el Ayuntamiento de Valladolid, una por Aemet, y el resto, por las instalaciones potencialmente contaminadoras de la atmósfera ubicadas en la Comunidad, tal y como lo exige la autorización ambiental. También se utiliza, para optimizar los recursos, la estación de la Comunidad de Madrid situada en San Martín de Valdeiglesias. En total, 200 analizadores que vigilan la calidad del aire durante las 24 horas del día y los 365 días del año.

Tendencias

El informe incluye también un apartado de análisis de la tendencia de la evolución de la contaminación en Castilla y León en los últimos 12 años. En el mismo se pone de manifiesto el descenso en la contaminación por dióxido de nitrógeno se ha producido en todas las estaciones analizadas y en un porcentaje que alcanza entre el 30 y el 50 por ciento. Para las partículas, la situación es más variable al depender de factores como las intrusiones de polvo de origen africano y las emisiones de incendios forestales entre otros, pero hay tendencia a la baja que varía entre el 10  y el 30 por ciento.

Por último, respecto al ozono, se observa una tendencia clara a la reducción de los valores más elevados registrados de esta sustancia y, al mismo tiempo, un incremento progresivo de los valores medios registrados, lo que contrasta claramente con los datos de reducción dióxido de nitrógeno, su principal precursor antropogénico.