AGROALIMENTACIÓN

Falta demanda de lechazos y cochinillos

Empieza a cundir el pánico entre los productores de lechazos y cochinillos. Vuelven a acumularse en cámaras frigoríficas. Con cenas y celebraciones reducidas, el sector no sabe qué va a hacer con el género

Castilla y León Televisión

A las las granjas y los congeladores llenos hay que sumar el cierre, por el momento, de la hostelería. No se venden cochinillos ni lechazos porque no hay celebraciones y las fiestas navideñas se esperan en grupos reducidos. Los criadores de estos productos esperan una campaña catastrófica.

No hay celebración sin degustar lechazo o cochinillo como plato principal. "En épocas de verano, Semana Santa y Navidad es cuando tiene su maximo consumo. Ahora, sin reuniones familiares, va a estar complicado que salgan los animales de las granjas", afirma el José Antonio Villaquirán, ganadero de Villaverde Mogina, en Burgos.

Los encuentros navideños se prevén con pocos comensales y comidas más sencillas. "Si van a ser los que habitualmente son, la gente no se esmera en comer una comida especial", opina el presidente de la IGP Lechazo Castilla y León, José Luis Fraile.

Los ganaderos de ovino tienen las explotaciones llenas. Arrastran el problema desde marzo porque ocho de cada diez lechazos de Castilla y León se degustan en bares y restaurantes, aún cerrados. "Es un lechazo de mucha calidad, de IGP, el que se viene consumiendo en el mercado de la restauración", afirma el presidente Asociación Ganado Ovino Raza Castellana, José Cancedo.

Los ganaderos venden poco y a un precio muy bajo. "Ahora mismo, el lechazo que tenía que valer unos 80 euros, hablamos de unidad de animal, está por debajo de los 50", asegura el presidente de ASAJA Burgos, Esteban Martínez.

Sin cochinillos en los asadores, los criadores tratan de buscar otras alternativas. "Hay que ir viendo qué decisiones se toman con ellos: cómo están las ventas, cómo está el mercado y si no se venden, dejarles para el lechón o para el cebo", argumenta el presidente Asociación Promoción Cochinillo de Segovia, José María Ruiz.

Si este año no se cumple con la tradición, muchas explotaciones tendrán que cerrar.