La empresa Leche Gaza ha presentado su nueva fábrica, ubicada en el polígono industrial ‘El Pinar’, en el término municipal de Coreses (Zamora), en la que se ha hecho una inversión de 23 millones de euros, a la que se sumará otro millón con la instalación de placas solares y otras mejoras.
La empresa, que tiene 41 trabajadores fijos y da trabajo a otros 250 relacionados con el transporte externo y las granjas, produjo 48 millones de litros el año pasado y aspira a alcanzar 44 o 60 millones de litros durante este ejercicio, en función de la evolución de la situación actual.
La nueva planta, “particularmente innovadora” en materia de sostenibilidad, responde a la apuesta de la central lechera por la “transición verde”, según explicó el director gerente, Ignacio Quintanilla. “Nos hemos dotado de unas instalaciones modernas y capaces de acoger un crecimiento que confiamos, sea sostenido pero constante. Así ha sido a lo largo de los últimos años, a pesar de todos los retos a los que nos hemos tenido que afrentar, tanto por cuestiones propias como del contexto en el que funcionamos. Leche Gaza lleva años apostando por la transición verde”, recalcó.
“Por eso, al trasladarnos a estas nuevas instalaciones, la sostenibilidad ha sido uno de los pilares fundamentales para el desarrollo de los procesos en fábrica. Este año, hemos llevado a cabo la declaración ambiental del producto desde la granja hasta la mesa, incluyendo todo lo relativo a huellas ambientales dentro del ciclo de vida del producto”, añadió.
En este contexto, Ignacio Quintanilla incidió en el carácter “pionero” de la empresa, tanto por la certificación en granja como por la declaración ambiental. “Si nos comparamos con la antigua fábrica, debemos destacar que, gracias a la implantación de procesos innovadores que mejoran la eficiencia energética, hemos reducido la huella de carbono un 18 por ciento, lo que equivale a dar 160 vueltas al mundo en coche”, precisó.
“También hemos conseguido una reducción del uso de recursos fósiles, lo que ha disminuido el consumo de gas en un 33 por ciento y de electricidad, en un 22 por ciento y todo esto, teniendo en cuenta que hemos aumentado la capacidad productiva de la fábrica”, agregó.
Nuevo envase
Igualmente, el gerente de Leche Gaza incidió en el nuevo envase ‘carbón neutral’, que aparece en un formato “más atractivo, cómodo y ecológico”, según destacó. “El cartón que utilizamos procede de fuentes renovables y todas las emisiones generadas durante la producción y transporte del envase se han neutralizado a cero; lo complementamos también retirando el plástico de las cajas”, apuntó.
“Todas estas innovaciones se complementan a la perfección con nuestra leche de cercanía, que llega a la fábrica tras recorrer menos de 50 kilómetros. Es algo que debemos poner en valor. La sostenibilidad es uno de los pilares estratégicos de Leche Gaza”, insistió.
Además, hizo hincapié en que la sostenibilidad “trasciende a lo ambiental” e incorpora las contribuciones y acciones en materia económica y social. “Llevamos 56 años generando riqueza en el medio rural y luchando contra la despoblación. Entra dentro de nuestras prioridades irrenunciables el objetivo de fijar población en el medio rural”, subrayó. “En realidad, nuestra propia idiosincrasia nos lleva a reforzar esta tarea a través de una actividad que se realiza sobre el terreno y que contribuye, sin duda, a generar empleo en el entorno”, concluyó.
Por su parte, el presidente de Leche Gaza, Heliodoro Rodríguez, recordó que el proyecto suma 56 años de vida y que “vivió un momento clave con el traslado a las nuevas instalaciones”, hace ya unos meses. “Este movimiento supone un paso importante para el futuro de Leche Gaza; un futuro que sigue pasando por nuestras manos, las de los ganaderos, que cada día nos esforzamos para traer aquí la mejor leche”, afirmó.
“No crean que es sencillo. Nuestro sector está acostumbrado a resistir, a situarse al pie del cañón cada vez que la sociedad lo necesita y a aguantar cuando el viento sopla en contra. Creo que lo hemos demostrado lo suficiente en los últimos años”, aseguró.
En este contexto, Heliodoro Rodríguez recalcó que el escenario “no es fácil” pero que el proyecto de la central lechera “sigue siendo la mejor garantía para capear los temporales y para crecer todos juntos hacia un futuro próspero” y apostilló: “Nuestro objetivo es colaborar con la vertebración del territorio y con la tarea de fijar población, que tan necesaria es en el territorio donde nos asentamos, junto con nuestras familias”.