TRIBUNALES

El excapellán de Las Angustias acusado de abusos acusa a la menor de engatusarle para luego chantajearle

Europa Press

Fiscalía de Valladolid ha elevado de tres a cuatro años de cárcel la petición de pena para el excapellán de la iglesia de Las Angustias, O.F.L, acusado de abusos sexuales sobre una menor de 13 años, y ello a pesar de que el religioso haya enmarcado el material que envió a la denunciante vía whatsapp en un mero "juego sexual" e incluso acusara a ésta de engatusarle para luego someterle a chantaje entre ella, su madre y una tía.

Las explicaciones del ya excapellán no han convencido a la fiscal jefe, que si en principio pedía tres años de cárcel, en el trámite de exposición definitiva de conclusiones ha sumado un año más, hasta un total de cuatro, al calificar los hechos como un delito de corrupción de menores en concurso con otro de abusos sexuales, y todo ello junto con las preceptivas solicitudes de prohibición de comunicarse y aproximarse a la víctima y la imposibilidad de realizar actividades que impliquen contacto con menores.

Durante el juicio a puerta abierta, que ha quedado visto para sentencia en la Audiencia de Valladolid, el encausado ha reconocido haber flirteado con la menor en lo que ha calificado de un mero "juego sexual" que, como ha explicado, mantuvo con la niña rumana a través de los whatsapp que la enviaba al teléfono móvil de su madre y que acostumbraba a utilizar la niña.

El acusado mantiene la tesis de que todo lo ocurrido se enmarca en una especie de conspiración de la niña y su familia para pillarle en un renuncio y luego sacar tajada, el excapellán sostiene que la iniciativa de los mensajes y petición de encuentros fue de la menor, que en un momento dado le comunicó que una tía había visto los whatsapp y se lo había contado a su madre.

Fue a partir de ese momento cuando, tal y como sostiene el acusado, las tres mujeres comenzaron a someterle a chantaje para no denunciar los hechos ante la policía. "Creo que la niña actuó guiada por la madre o por la tía, tengo esa convicción, de que todo estaba pensado de antemano, sobre todo por la insistencia de que se me viera la cara en los vídeos que mandaba", ha insistido O.F.L, quien mantiene que las tres mujeres de nacionalidad rumana, a cambio de su silencio, le pidieron 120.000 euros para comprarse una casa en Rumanía.