Con el precio de la factura de la luz por las nubes, los consumidores buscan alternativas para pagar lo menos posible. Cada vez son más los que se unen a cooperativas con el objetivo de paliar este gasto. La jefa de administración de Megara energía, Ana Antón reconoce que sí han visto un aumento en el volumen de su trabajo, bien por los socios que están en la cooperativa, que se quieren informar de cómo bajar sus facturas de la luz y también por los nuevos socios. El consejero delegado de EnergÉtica coop, Juan Guijarro, otra cooperativa energética asegura que su objetivo "no es ganar dinero, ni subir la tarifa o tratar de engañar para que al final acabes pagando más".
 
Aun así, las cooperativas advierten: se encuentran atados de pies y manos por el mercado mayorista. "No se puede bajar el precio de la luz porque estamos anclados a la nueva regularización que parte del Gobierno en los peajes que tenemos que pagar a las distribuidoras", explica Ana Antón. Con el precio de la luz disparado solo se puede hacer una cosa: asesorarse para buscar la mejor alternativa.

Las cooperativas ofrecen un servicio distinto, "de más calidad" afirma Juan Guijarro. Cree que "la gente entiende que las grandes eléctricas tradicionales son, en alguna medida, parte del problema". Crecen las cooperativas de energía y aumenta la demanda de sus usuarios, aunque lo que sigue subiendo es el precio de la luz en un agosto que puede marcar un máximo histórico.